Iveco Bus, en colaboración con el concesionario Overbus y el Grupo Metropol, ha comenzado una prueba de rendimiento del autobús 170G21 a Gas Natural Comprimido (GNC) en la localidad bonaerense de Escobar. Este modelo, fabricado en Argentina, será evaluado durante 60 días, con el objetivo de evaluar su desempeño en condiciones de operación urbana. El bus está diseñado para ser utilizado en la línea 507 de Escobar y representa una apuesta a la sostenibilidad en el transporte público.
Según Ricardo Cardozo, presidente de Iveco Group Argentina, la sustentabilidad es un principio clave en la compañía, y el Gas Natural se posiciona como una alternativa fundamental para reducir las emisiones contaminantes y promover un desarrollo energético más responsable. En este contexto, la colaboración con el Grupo Metropol y las autoridades locales subraya un compromiso compartido con la movilidad sustentable y la mejora de la calidad del aire.
El autobús 170G21 es el primer modelo de este tipo fabricado en Argentina. Este vehículo cuenta con una serie de beneficios ambientales significativos, como la reducción de un 95% de las emisiones de material particulado, un 90% de dióxido de nitrógeno y un 10% de dióxido de carbono, lo que lo convierte en una opción más limpia frente a otros vehículos de transporte urbano. Además, el motor de este modelo es particularmente silencioso, lo que contribuye a una disminución de la contaminación sonora, con una reducción de hasta 3 decibelios, lo que lo hace adecuado para realizar servicios nocturnos sin perturbar la tranquilidad de los residentes cercanos.
Este autobús también destaca por su eficiencia operativa, ofreciendo una autonomía de hasta 350 kilómetros, lo que lo convierte en una opción viable para rutas urbanas de largo recorrido. En cuanto a la recarga, el bus 170G21 se puede llenar completamente en tan solo 20 minutos, lo que reduce significativamente el tiempo de inactividad y aumenta la disponibilidad del vehículo para su operación.
Además, este modelo incluye 9 tanques de gas, lo que mejora su eficiencia energética y sostenibilidad, y su carrocería presenta un diseño moderno y accesible. El autobús cuenta con 37 asientos y dos espacios reservados para sillas de ruedas, junto con una rampa para el acceso de personas con discapacidad. También está equipado con aire acondicionado para asegurar la comodidad de los pasajeros durante su viaje.
La fábrica de Iveco en Córdoba, que produce este modelo, ha sido clave en la creación de este vehículo y representa un pilar importante en la economía local. La planta también se ha convertido en un ejemplo de cómo la industria argentina está avanzando hacia el uso de tecnologías más limpias y eficientes. El proceso de carrocerización de estos autobuses lo realiza Italbus, una compañía argentina que se especializa en la fabricación de carrocerías para ómnibus urbanos e interurbanos, y que es uno de los principales socios de Iveco en el país.
En resumen, el bus 170G21 de Iveco es una clara muestra del compromiso de la compañía con la movilidad sustentable, la reducción de emisiones y la mejora de la calidad del transporte público en Argentina. La prueba de rendimiento que se realiza en Escobar es solo el primer paso hacia un futuro más limpio y eficiente para el transporte urbano del país.