La electrificación del transporte ha comenzado a transformar nuestras ciudades, y Volvo está a la vanguardia de esta revolución. En Brasil, Volvo ha iniciado pruebas con su primer ómnibus biarticulado 100% eléctrico en la ciudad de Curitiba, marcando un hito en el transporte urbano masivo.
El chasis biarticulado de Volvo es el vehículo eléctrico más grande de su portafolio mundial. A pesar de su tamaño, mantiene la eficiencia y robustez características de su equivalente diésel, utilizando el mismo bastidor, ejes y suspensión. Equipado con el sistema de propulsión eléctrico de Volvo Group, el biarticulado ofrece una alternativa ecológica y eficiente para el transporte masivo de pasajeros.
El motor eléctrico, situado entre el primer y segundo eje, asegura una óptima distribución de la carga, permitiendo un diseño interior completamente libre para los pasajeros. Con una longitud de 28 metros, este vehículo puede transportar hasta 250 pasajeros, convirtiéndose en una solución ideal para sistemas de Bus Rapid Transit (BRT). Según André Marques, presidente de Volvo Buses América Latina, “un BRT con estos vehículos puede transportar la misma cantidad de pasajeros que un metro, pero con costos significativamente menores y cero emisiones”.
Los buses eléctricos biarticulados de Volvo están equipados con dos motores de 200kW cada uno, sumando un total de 400kW, equivalentes a 540 HP. La caja de cambios automatizada de dos velocidades, basada en la reconocida transmisión I-Shift, mejora la capacidad del bus para superar pendientes y reduce la vibración de los componentes, resultando en un mejor rendimiento y una mayor vida útil del vehículo, además de un menor costo de mantenimiento.
Con una capacidad total de 720 kWh proporcionada por hasta ocho baterías, el biarticulado eléctrico puede alcanzar una autonomía de hasta 250 kilómetros. El tiempo de recarga completa varía entre 2 y 4 horas, dependiendo del tipo y potencia de la estación de carga. Además, está disponible una opción de cargador en el techo para recargas rápidas en terminales BRT durante el recorrido diario.
Inicialmente, las pruebas se llevarán a cabo en Brasil, pero Volvo ya planea expandirlas a Bogotá (Colombia) y Ciudad de México, ciudades que también cuentan con sistemas de transporte BRT. Esta iniciativa no solo representa un avance significativo en la tecnología del transporte, sino también una firme apuesta por la sostenibilidad y la reducción de emisiones en nuestras ciudades.